El jardín es un espacio luminoso que aporta tranquilidad para el relax y contacto con la naturaleza; si bien en verano es cuando más se aprovecha la vida al aire libre, en invierno también se puede disfrutar del verde de las plantas y tener un hermoso sitio acondicionado donde conectarse con el exterior.
Hay muchas maneras de hacer un jardín de invierno y diferentes formatos, aunque por lo general se realizan con perfiles y estructuras acompañando el diseño mismo de la vivienda. adosados a ella, como otro espacio, son herméticos, contienen plantas y un estar placentero.
Los invernaderos o jardines de invierno pueden ser parte del cuerpo de la casa, adosándose a la misma como un nuevo ambiente, o funcionar en medio del jardín, provistos de una estructura convenientemente cerrada.
Sin embargo, la concepción de jardín de invierno ha evolucionado, mediante la inclusión de los mismos en pequeños patios internos que posibilitan decorar y embellecer un salón, siendo a veces no techados.
ORIENTACIÓN
Lo ideal es que el espacio vidriado que diseñemos este orientado hacia el norte, aunque esta condición puede estar restringida a la disposición existente del espacio utilizable.
Para la ubicación del mismo sera necesario tener en cuenta la trayectoria del sol en el invierno (baja altura), para aprovechar al máximo las ganancias solares en esta época y se lo deberá proteger en verano de los soles más altos, para evitar sobrecalentamiento.
MATERIALES
La superficie vidriada es el elemento fundamental, pues su característica particular permite captar toda la energía del sol, en invierno. Los avances de la fabricación de los vidrios especiales como los doble vidriado, laminados, reflectivos, nos permiten utilizar este espacio también en verano. Estos se suman a las nuevas técnicas de aleaciones de aluminio extruído, anodizados, pvc, o combinaciones con madera, con puente térmico, que permiten la realización de estructuras funcionalmente mas aptas por su hermeticidad, aislación térmica, que no requieren mantenimiento, y que por sus acabados superficiales resultan cálidos a la vista. Igualmente el pvc y la madera son excelente materiales para lograr espacios cálidos, y mejores condiciones térmicas que los metales, en cambio el hierro es un material requerido por los amantes del estilo industrial.
Es conveniente que el piso del espacio solar sea oscuro o tonos medios y tenga una muy buena aislación térmica e hidrófuga del suelo, pues de esta manera captará mejor la radiación solar y se evitarán perdidas de calor en invierno. En verano estos espacios tendrán que estar protegidos del sol. Los muros que dan al invernadero también servirán como captadores y distribuidores de calor hacia otros ambientes, los mas convenientes son los revestimientos de piedra o ladrillo.


PROTECCIÓN
El sombreo en verano es fundamental, puesto que puede tornarse inhabitable, si dejamos ingresar los rayos altos del sol estival.
La protección se puede realizar mediante pérgolas, con enredaderas caducas ( que permiten el paso del sol en invierno) o arboles cercanos al espacio, del mismo tipo. persianas exteriores o postigos rebatibles, que al cerrarlos eviten perdidas de calor en noches frescas, también parasoles horizontales, techos plegadizos o lonetas con tensores, etc.
FUNCIONAMIENTO TÉRMICO EN INVIERNO
Durante las horas de sol, la superficie vidriada deja pasar toda la energía de la radiación y la acumula en pisos y muros para entregarla al ambiente cuando la temperatura exterior comienza a descender.
La inercia térmica de los materiales, con que se construyen los pisos y muros, hace posible este fenómeno de retención del calor y posterior devolución al espacio.
Se trata, en definitiva, de hacer del invernadero o jardín de invierno no solamente un espacio tapón o moderador de la temperatura, entre el exterior y el interior de una vivienda, sino también un lugar habitable y confortable.


MUEBLES PARA JARDÍN DE INVIERNO
Con respecto a los muebles y la decoración se puede pensar en unos buenos sillones y una excelente iluminación ya sea para leer, tejer o cualquier otra actividad acompañados por algunas plantas de interior.
Si estos jardines están integrados directamente a la casa, pueden emplearse como desayunadores o espacios de reunión familiar, variando la decoración del ambiente, haciéndola mas fresca y casual con colores claros.
PLANTAS PARA JARDÍN DE INVIERNO
Las plantas más sugeridas para este tipo de jardines, y las que mejor se acoplan a la decoración de jardines de invierno, son los arbustos perennes, que garantizan un follaje verde constante.
Además del gusto propio, es necesario contemplar el tipo de planta respecto al espacio que se desea mantener vivo. Si se quiere ganar en altura, la mejor opción es una trepadora; en cambio, si lo que se quiere es ganar en frondosidad, lo indicado es pensar en alguna gramínea ornamental.
JARDINES DE INVIERNO CERRADOS
Si hace mucho frió en tu región es recomendable un patio de invierno cerrado, con cerramientos, con una estructura de acorde al diseño de la casa, con paneles de vidrio o policarbonato para permitir la entrada del sol, pero protegerte de las bajas temperaturas. Estos espacios deben ser protegidos del sol por plantas o toldos en lugares donde el verano es tórrido.
PATIOS INTERIORES O JARDINES DE INVIERNO ABIERTOS
Para los meses de otoño e invierno, si en tu región los fríos no son muy intensos puedes optar por jardines interiores sin techo, con algún climatizador como calentadores a gas, a leña, o a pellets. los patios interiores a la vivienda donde el mismo divide aéreas publicas, es muy común construcciones modernas actuales. Este espacio sirve para dar iluminación natural y ventilación a ciertas áreas comprometidas por el diseño. Estos espacios pueden ser centrales a la vivienda o estar en un lateral de la misma, limitados por una medianera. Existen algunos muy chicos donde no se puede colocar plantas por las características del diseño, y se generan jardines verticales sobre los muros que lo delimitan.
Los patios interiores, resultan verdaderos oasis en viviendas, con poco predio.

